martes, 16 de julio de 2019

Valparaíso, julio 2019, invierno...frío y solitario




Estoy retomando escribir en este blog. Cuando empecé tenía 27 años. Creo que ha sido la relación más duradera y productiva que he tenido con las redes sociales. Eso si cuando me leo, me da cosita. Es arriesgada la catarsis emocional que una se pueda permitir en estos lugares. Pero en fin, tantas soy, tantas y diversas, unas rarezas de seres, porque ya ni puedo llamarle mujeres. Dejo que corran libres cada una por lo suyo. Unas quieren cambiar el mundo, otras más bien esperan como si fueran sirenas eternas. Con unas he peleado a muerte, y ahí siguen, cortando margaritas a pie descalzo y sin prisa.

Es vertiginoso el acto de desnudarse frente al espejo a cualquier edad. Pero es una osadía desnudarse de las palabras que a una la arman como torre. El alma entonces como una esencia tierna se abre como un capullo que sólo responde al estímulo de la luz. Ahí se queda.





jueves, 11 de julio de 2019

Dime amor ¿qué hago con este amor?

¿Qué hago con este amor?
  este amor bordado a mano,
con flequillos empalagosos de cariño
  Este amor que ya caminaba solo
  Este amor que corría por estos pasillos...
 ¿En qué maleta lo acomodo?
  lejos de qué, cerca de dónde
¿Lo dejo que se seque en el techo junto a las cáscaras de naranja?
¿Lo lavo y lo guardo planchado junto a la ropa de mis muertos?
¿Me lo trago o lo mastico?
¿Lo reparto entre mis amigos?
¿Lo deposito en el banco del desamor?
¿Lo atornillo como una ampolleta desahuciada en el gollete de mis deseos?
¿Lo cocino con manteca y un poco de vino?
De ese que bebimos embrujados
en tiempos de sol y festivales de coplas
En tiempos de hacer el amor a destajo
¿Qué hago amor con este amor?